Fue el fiscal Juan Pellegrino –acompañado por el fiscal general Armando Agüero-, el que reveló la trama más íntima de esta tragedia ocurrida en el campo “El Rincón”, a 15 kilómetros de Hilario Lagos.

Pellegrino relató que de acuerdo a la investigación oficial, Hugo Palacios escuchó los gritos de su hijo de 11 años, que se encontraba en una habitación de la casa. Eran alrededor de las 3 de la madrugada del viernes 12.

Cuando el hombre llegó hasta el dormitorio, su hijo le expresó que su primo -Exequiel Palacios-, le había bajado los pantalones con la intención de abusar sexualmente de él.

Fue de ese momento que Hugo Palacios comenzó a perseguir a su sobrino Exequiel, que huyó a pie en dirección a la salida del campo.

El hombre se dirigió a la camioneta Chevrolet S-10 y comenzó a perseguirlo hasta darle alcance en un descampado, en el que lo embistió con tal violencia, que le provocó un traumatismo de cráneo que fue lo que le provocó la muerte, de acuerdo a la pericia forense realizada en el cadáver de la víctima.

Tras el impacto contra el cuerpo, el propio Palacios llamó a la policía y dio cuenta de la situación.

Y como el menor de 11 años fue testigo directo de las circunstancias que rodearon el homicidio, la fiscalía solicitó la realización de una Cámara Gesell y pericias psicológicas, para determinar si el menor confirma los hechos del modo que relató su padre.

Fiscalía solicitó la prisión preventiva para Palacios hasta la finalización del proceso, encuadrando el caso en el homicidio simple.

Los defensores de Palacios reclamaron que el caso sea caratulado como “homicidio por emoción violenta” o en su defecto, “homicidio culposo”, y solicitaron la libertad de su defendido.

La audiencia de formalización fue presidida por la jueza Jimena Cardoso. En la acusación se desempeñaron el fiscal Juan Pellegrino y el fiscal general Armando Agüero. La defensa de Hugo Palacios es ejercida por Michel Devoy y Gerónimo Altamirano.