El ex delantero del seleccionado de Holanda, Rob Rensenbrink, falleció este sábado, a los 72 años, con la inolvidable marca de haber sido el jugador que anotó el tanto número 1000 en la historia de los Mundiales de fútbol, además de convertirse en quien pudo haber torcido la historia en la final de la Copa del Mundo Argentina 1978.
La muerte del ex atacante de la denominada 'Naranja Mecánica' de la década del '70 fue confirmada por el periódico holandés Telegraaf.
Rensenbrink desarrolló su trayectoria deportiva, principalmente, en Bélgica, erigiéndose en ícono del Anderlecht, club para el que anotó 124 goles, en el marco de nueve temporadas (1971-1980).
Pero el ex extremo izquierdo del equipo 'naranja' del DT Rinus Michels alcanzó notoriedad en el Mundial Argentina 1978. Primero, en la etapa clasificatoria, el delantero ejecutó y convirtió un tiro penal en el partido que Holanda terminó perdiendo ante Escocia (2-3), en el estadio Malvinas Argentinas de la ciudad de Mendoza.
Lo significativo de esa conquista, producida a los 34 minutos de la primera mitad, es que consistió, en ese entonces, en el gol número 1000 en la historia de las Copas del Mundo.