Un grupo de cinco ladrones protagonizó un violento asalto a una joyería ubicada en pleno centro de la localidad bonaerense de San Francisco Solano, donde llevaron a la práctica un insólito método para engañar a sus víctimas: uno de ellos se hizo pasar por una persona con discapacidad motriz e ingresó al local, para luego pararse y sumarse al robo junto a sus cómplices.
El hecho ocurrió este martes en un comercio de avenida 844 al 2508, en la localidad repartida entre los partidos de Quilmes y Almirante Brown, cuando uno de los sujetos entró para realizar una consulta sobre un reloj, en el cual mostró un presunto interés. Entonces, fingió amabilidad al abrirle la puerta a un hombre que parecía tener un problema de movilidad y se desplazaba en silla de ruedas, que era empujada por un tercer individuo.
Una vez adentro, tardó tan sólo unos segundos en levantarse, extrajo un arma y empezó a amenazar a los empleados. "Pará, tranquilo, tranquilos, ya está", exclamó una de las víctimas, mientras que el hombre que lo acompañaba también tomó una pistola y se puso en posición de disparo.
El sujeto que estaba en la silla de ruedas abrió un bolso rojo y cuadrado que llevaba encima de sus piernas, y que tenía el logo de una famosa empresa dedicada a los envíos a domicilio. Los otros sospechosos se colocaron del otro lado del mostrador y se llevaron todas las joyas que estaban en los cajones y vitrinas que se exhibían en el mostrador.
Al mismo tiempo, un cuarto delincuente agredió a una mujer que estaba en la puerta del local. Otro cliente que miraba las vidrieras fue sorprendido y atacado a golpes y patadas por un quinto ladrón que se había quedado allí como "campana", para advertirles a los otros la posible llegada de la Policía.
Joyas, anillos y collares fueron parte del botín, junto a los teléfonos celulares de los empleados y el dinero de la caja registradora. La secuencia de terror, en la que los ladrones actuaron utilizando guantes y con sus rostros semi cubiertos, duro poco más de un minuto y finalizó cuando se subieron a un Toyota Corolla para darse a la fuga.
Los responsables del robo notaron que la mayoría de las personas que estaban fuera del local no se percataron de lo que había pasado, a excepción de los clientes que estaban tomando un café en el multiespacio Provenzano, a quienes apuntaron antes de subirse al vehículo. Todo el episodio quedó registrado por las cámaras de vigilancia de la joyería.
La impotencia del dueño de la joyería: “Está liberada la zona"
“Dos estaban armados, eran ladrones con guantes. A un hombre lo metieron adentro, lo cag... a palos”, relató Martín Blanco, dueño del comercio, en diálogo con el programa Mediodía Noticias (eltrece). “Fue cuestión de segundos”, agregó, mientras que adelantó que todavía están calculando cuál fue el valor de la pérdida que les generó el asalto.
“Está liberada la zona. Uno entró en silla de ruedas, sacó, desenvainó, dijo quédense quietos y nos robó”, denunció al contar cómo el ladrón con una supuesta discapacidad se levantó de la silla, sacó el arma y encañonó a los empleados, mientras el otro le exigía dinero y joyas.
“Hace diez años nos había pasado, pero había dejado de pasar. Siempre que hay año electoral pasan estas cosas”, señaló Martín. “Al pobre hombre que agarraron estaba mirando un relojito, lo tiraron como una bolsa de papa y lo arrastraron. Fue al que más golpearon, mientras que a mi hermano y a mi hijo los llevaron para el fondo diciéndoles, '¿dónde está el oro?’”, manifestó.
Este robo no se trató de un hecho aislado, ya que los sujetos son conocidos en Solano como "La banda de la silla de ruedas". Hace una semana, con una modalidad similar, asaltaron un negocio de venta de celulares que ese día estaba inaugurando el nuevo local. Por el momento, las autoridades no lograron detener a ninguno de ellos por ambos casos.
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