Un 9 de julio de 1816, representantes de las provincias Unidas se constituyeron en una Nación libre e independiente de los reyes de España. Con un sencillo acto, la municipalidad de General Pico evocó la gesta más gloriosa de nuestra emancipación política. Los laureles conquistados por las mujeres y los hombres que habitaban nuestro suelo sirvieron de base firme para el nacimiento de la patria, para que florecieran la libertad e independencia.
El acto contó con la presencia de la intendenta Municipal, Fernanda Alonso; del viceintendente, Daniel López; concejales, secretarios del Ejecutivo y demás autoridades militares, policiales, de seguridad y salud.
Después de la entonación de las estrofas del Himno Nacional Argentino, hizo uso de la palabra el viceintendente Daniel López. En el final, la cantante Mayra Mallet junto al músico Franco Nicolini interpretaron “La Maza” y “Soy Pan, soy Paz, soy Más”, de Mercedes Sosa.
Palabras alusivas de Daniel López
“Hoy, a 204 años de la declaración de la independencia de nuestro país, es un momento oportuno para reflexionar sobre los sucesos acontecidos ese 9 de Julio de 1816.
Sucesos, que sin duda formaron parte de un largo proceso que sobrellevó avances y retrocesos, y que de ninguna manera fue lineal ni culminó con el acta de proclamación de la Independencia.
Como cada aniversario de lo que significó nuestra emancipación, resulta menester emular la valentía de aquellos hombres y mujeres que decidieron cortar lazos con España, para ser responsables de una historia independiente.
Sucesos, fechas y acciones es lo que estudiamos en historia, sin embargo, muchas veces no le encontramos el verdadero significado de lo que es ser independiente.
La independencia no es únicamente una declaración hecha en un momento histórico determinado, es algo que se construye día a día, con innovación, oportunidades, desarrollo, es un proyecto de país.
Para un pueblo, independencia es sinónimo de soberanía, es el derecho y el deber de ejercer la autoridad en su territorio, libre de dominaciones e injerencias externas. Libertad para disfrutar de los derechos que están pactados en nuestra constitución, pero también para cumplir con las obligaciones que el ser ciudadano, ciudadana, nos impone con absoluta responsabilidad.
Ayer los congresales nos dejaron como legado esta tierra, nuestro país, la libertad y el sentido de pertenencia.
La decisión política de declararnos libres como pueblo fue la consecuencia de tomar conciencia de la necesidad de unir esfuerzos y voluntades, para comenzar a construir juntos una identidad territorial y nacional.
Hoy, en este contexto tan complejo que nos toca atravesar, deberemos tener la misma decisión para una verdadera construcción de soberanía, porque la independencia recae también en las oportunidades de cada vecina y vecino.
Debemos entender los principios y los valores de quienes lucharon por nuestra independencia, esencialmente la dignidad y la libertad, debemos todos y todas, gobierno y sociedad profundizar y construir estos ideales fundamentales para nuestra Patria. Sólo así conseguiremos alcanzar soberanía política, territorial, independencia económica y justicia social.
Propiciar el acceso al trabajo, la producción, el acceso a la educación, vivienda, el desarrollo integral en general, es parte de la independencia de los pueblos.
Pero además, debemos asumir desde el lugar y compromiso diario, nuestro propio destino y construir un país solidario, más honesto, más responsable y justo.
Porque la patria es algo más que un concepto abstracto, es algo que creamos día a día entre todos y todas.
La emergencia sanitaria que nos toca afrontar cambió el rumbo de nuestro desarrollo y nos obligó a replantear nuestras actitudes cotidianas y el sentido de libertad, en el contexto de comunidad.
No somos una isla, somos con el otro, somos la sociedad que construimos, y es aquí donde estoy convencido que la historia no la hacen solamente los próceres, sino también cada uno de nosotros y nosotras.
Es en esta fuerza de estar unidos y unidas donde recae también la fuerza de nuestro país. Es ahí donde ninguna determinación externa nos puede someter a condiciones de desarrollo, ni de dominación. Es en nuestras fortalezas donde evitaremos caer en manos de los que siempre vieron nuestra tierra como un negocio, sin pensar en sus habitantes. Ellos, los verdaderos enemigos actuales, son los que pretenden impedir que nuestro país se desarrolle de forma plena y próspera.
Y es ahí, en la fuerza y la unión donde vamos a decir que NO, que no queremos más sometimiento de ningún tipo. Que NO queremos que las deudas contraídas con anterioridad sean el futuro de rodillas de nuestros hijos e hijas.
Es así que debemos ser responsables de activar mecanismos de participación con alto compromiso ciudadano, en donde exista como elemento de cohesión un sentimiento ajeno a todo individualismo, que nos permita continuar con el fortalecimiento de nuestra independencia.
Vecinos, vecinas, que este 9 de julio, donde el contexto no nos permite estar físicamente más próximos, aunemos nuestro sentimiento por nuestro país que tanto nos ha dado.
Que esta emergencia sanitaria, esta crisis, también sea una oportunidad para salir adelante en conjunto.
Ayer revelarse contra los realistas fue hacer Patria, hoy el desafío de hacer grande nuestra nación es actuar con responsabilidad. ¡Feliz Día de nuestra Independencia!”.