Uno de los pilotos más talentosos que tuvo el Mundial de Rally, Hannu Mikkola, falleció a los 78 años tras pelear durante un largo tiempo con un cáncer.

El finlandés, quien debutó en el Campeonato Mundial de Rally en Montecarlo 1973, al mando de un Ford Escort y con el que finalizó 4°, había incursionado en las pruebas de la especialidad una década antes, en los torneos de Finlandia y el Campeonato Europeo de Rally, donde se impuso en tres ocasiones en el Rally de los 1000 Lagos.

En el Mundial, participó en 123 competencias y se impuso en 18, con Peugeot 504, Toyota Corolla, Ford Escort, pero el modelo emblemático fue el Audi Quattro, con el que logró diez lauros y el título de campeón del mundo en 1983.

Nacido a finales de mayo del 42 en Joensuu, una pequeña ciudad del sudeste del país, Mikkola comenzó a competir a nivel nacional durante la década de los 60, destacando en seguida al volante de diferentes modelos de Volvo, Datsun y Lancia, con los que corrió también sus primeros rallies internacionales: el Montecarlo, el Acrópolis, el Tour de Corse, incluso el RAC británico.

Una tierra donde empezó a prodigarse a menudo, copilotado entre otros por el actual presidente de la FIA, Jean Todt, después de lograr, al acabar el verano del 74, la primera de las 7 victorias que sumó en el 1000 Lagos. Un récord que sólo consiguió igualar después Marcus Grönholm, a finales de la pasada década.

En 1978, después de haber competido con diversos Fiat, Peugeot y Toyota, Mikkola fichó como piloto oficial de Ford y ganó el campeonato británico, a los mandos de un Escort RS 1800 MkII, con el que dio el salto definitivo al Mundial.

Subcampeón en 1979 y 1980, a espaldas, respectivamente, de Björn Waldegard y Walter Röhrl, el finlandés fichó por Audi para ponerse al volante del revolucionario Quattro A1 de tracción integral. Un coche de época, en el que libró grandes batallas frente a Stig Blomqvist y Markku Alén, hasta proclamarse campeón del Mundo en 1983, con cuatro triunfos.

(Con información de Campeones y Marca)