Wenceslao Bunge Saravia protagonizó otro particular episodio. El embajador argentino en España fue el orador principal en el acto que se realizó en Cádiz, en el marco del 175º Aniversario de la muerte del General José de San Martín.

Saravia hizo entrega de la Ofrenda Floral en Cádiz junto al alcalde de la ciudad, Bruno García de León, el cónsul argentino en Cádiz, Sergio Servin, así como otras autoridades locales y miembros de la comunidad.

La cuenta oficial de la embajada en Instagram destacó las palabras del Embajador: “el espíritu de Cádiz forma parte de la memoria histórica que une a Argentina y España, recordando los años decisivos que San Martín vivió en esta ciudad, los cuales marcaron su ideario y su lucha por la libertad”.

“Como dijo el General San Martín, el Embajador nos recordó su célebre frase: ¡Seamos libres, que lo demás no importa nada!”, continuó Saravia, que en medio de los aplausos se envalentonó y lanzó un “¡Viva el rey!” que sorprendió a los presentes y despertó indignación entre los argentinos.

“Más cipayo no se consigue. San Martín debe estar contentísimo”, afirmó un diplomático que trabaja en Madrid.

Bunge viene de desatar la furia de Karina Milei, luego de publicar una foto que se sacó en la sede diplomática de Madrid con Fátima Flores, la ex novia del presidente que no terminó en buenos términos con su ex cuñada.

La publicación contaba con varias fotos que no fueron del agrado de Karina, que terminó llamando al embajador muy enojada. El posteo no se borró, pero se cambió por otro con menos imágenes, y más sobrias.

“Calentá que entras Nimo”, dijo en tono jocoso un diplomático en relación a Alejandro Nimo, Agregado de Promoción de Inversiones y Comercio Internacional en Embajada, que aspira a quedarse con el puesto de Bunge.

Bunge llegó por una fuerte influencia de la familia Sigman en Madrid. Tanto Sigman como Bunge participan juntos de los programas Acelerar España, que coordina Leandro Sigman, con charlas a los emprendedores y a las startups.

(LPO)