La primera ministra del Japón, Sanae Takaichi, debe retractarse de sus comentarios erróneos si desea desarrollar una relación estratégica y mutuamente beneficiosa con China, según señaló este viernes la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning.
“Los descarados comentarios erróneos de la primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, sobre Taiwán, que insinúan la posibilidad de una intervención armada en el estrecho de Taiwán, han provocado la indignación y la condena del pueblo chino”, manifestó Mao.
Según información de Xinhua, la funcionaria china habló en una conferencia de prensa en la que además reiteró la firme oposición de China a los dichos de la primera ministra de Japón.
Mao acotó: “Si Japón desea desarrollar una relación constructiva y estable con China, que cumpla con los requisitos de la nueva era”.
“Debe cumplir con el espíritu de los cuatro documentos políticos entre los dos países, honrar sus compromisos políticos, retractarse inmediatamente de sus comentarios erróneos, y cumplir con los compromisos que ha hecho a China”, agregó Mao.
Lejos de apaciguarse, entonces, el actual conflicto China - Japón parece propagarse como un incendio.
La contundencia de una vocera
A continuación, Mao Ning fue contundente: “Si Japón quiere seguir la vieja senda del militarismo, abandonar su compromiso con el desarrollo pacífico y socavar el orden internacional posterior a la Segunda Guerra Mundial, a la postre terminará fracasando”. Según informes de medios de comunicación, Japón exportó por primera vez misiles de defensa aérea Patriot de producción nacional a Estados Unidos, aprovechando la flexibilización de las restricciones.
Mientras tanto, el Partido Liberal Demócrata de Japón inició discusiones para revisar sus tres principales documentos de seguridad, entre ellos, los Tres Principios no Nucleares de no poseer, no producir y no permitir la introducción de este tipo de armas en territorio japonés.
Al responder a consultas sobre el particular, Mao Ning declaró en una rueda de prensa regular, que después de la victoria en la Segunda Guerra Mundial, documentos jurídicos internacionales como la Declaración de El Cairo, la Proclamación de Potsdam y el Instrumento de Rendición Japonesa, estipularon claramente las obligaciones de Japón como país vencido, las cuales incluían el desarme completo y la prohibición de mantener industrias que pudieran permitir el rearme.
Sin embargo, Japón expandió constantemente su poder militar en los últimos años, con un presupuesto de defensa que aumentó durante 13 años consecutivos, y la aprobación de un nuevo proyecto de ley de seguridad para levantar la prohibición sobre los derechos de autodefensa colectiva, sostuvo Mao. Agregó que Japón flexibilizó continuamente las restricciones a la exportación de armas, e incluso comenzó a exportar armas letales.
Mientras afirma que quiere establecer un mundo libre de armas nucleares, este país intentó revisar los Tres Principios no Nucleares, lo cual señala un paso hacia un mayor rearme.
(AgenciaNA)