El fiscal Armando Agüero sostuvo que pese a que cambian las modalidades a la hora de una estafa, el fin siempre es el mismo: sacarte datos primero, y dinero después.

El domingo, obtuvo el número de teléfono por Google y se comunicó en horas de la tarde para solucionar un vencimiento en su tarjeta de crédito VISA de Banco Nación. Según denunció, llamó, y en un momento, “por error”, generó un préstamo de casi dos millones de pesos. Todo con la llamada telefónica en curso.

Para solucionarlo – subsanar la operación bancaria que había hecho por error - del otro lado del teléfono le propusieron hacer trasferencias.

¿Qué le propusieron? “Bueno si no querías el préstamo, para solucionarlo, tenés que transferirme esa plata al CBU N°…”, le dijeron.
Aturdido, la víctima hizo caso a la propuesta, y en cuestión de minutos transfirió lo que había sacado de préstamo, es decir, los casi dos millones de pesos argentinos. Además, realizó otras tres transferencias por  más de $400 mil pesos a otro titular.

En total, transfirió la suma superior a los tres millones de pesos.

El lunes, informó al Banco Nación de lo sucedido –sucursal Victorica- y luego radicó la denuncia en la Comisaría Departamental Victorica, para poder recuperar el dinero.

La causa está caratulada como estafas y otras defraudaciones, e interviene el fiscal Enzo Rangone de la Oficina Única del Ministerio Público Fiscal de la IV Circunscripción Judicial con asiento en Victorica.

Datos primero, después…

Armando Agüero, fiscal General de la IV Circunscripción, expresó que las modalidades cambian, pero el fin de sacarte los datos y luego el dinero, sigue. Por ello, recomendó que hay que ser cautos a la hora de brindar información personal.

“Un dato arrojado en una búsqueda de Google o cualquier otro buscador en internet, no es de confianza. En lo posible, recurrir al Banco o a la web oficial, y recién allí evacuar dudas u obtener un teléfono oficial”, expresó el fiscal General.

“Las modalidades cambian a la hora del argumento de una posible estafa -continuó Agüero-. Pero el fin siempre es sacarte, pedirte datos, y cuando lo logran, te vacían la cuenta. Por ello, cuando es una comunicación telefónica, evitar dar datos personales y de cuentas bancarias. Cuando lo hacemos, le estamos dando la llave a un extraño para que nos opere la cuenta: a veces, además de vaciar la cuenta, te sacan un crédito en cuestión de segundos”.

(MPF Victorica)