Un hecho trágico tuvo lugar en Tandil cuando Lucas Pérez Cordero tomó la decisión de quitarse la vida de un disparo en la cabeza. Al momento de hacerlo, su padre ingresó a la habitación e intentó evitarlo, pero ambos fallecieron por el impacto de la misma bala.

Lucas era oficial de la policía local de Tandil, y su padre, Daniel Pérez, de 52 años, era periodista y jefe de redacción del diario La Voz de Tandil.

Según información de El Eco de Tandil, la situación comenzó cuando el padre recibió un llamado de otro de sus hijos, alertando que el joven estaba encerrado en su habitación y planeaba quitarse la vida. El hombre fue a su domicilio e intentó interrumpirlo. Cuando logró ingresar a la habitación a la fuerza -tras intentar convencerlo de que abriera la puerta- el joven se disparó con su arma reglamentaria, y la bala impactó a Lucas en la cabeza y luego a su padre sobre el ojo, causándole la muerte en forma accidental.

Si bien en un primer momento se pensó que Daniel Pérez falleció por la conmoción que le generó ingresar a la habitación y ver el hecho, luego los peritos y el fiscal Gustavo Morey, mediante una investigación, llegaron a la conclusión de que Lucas estaba sentado en su cama cuando se quitó la vida, y que el disparo tuvo orificio de entrada en la sien derecha y salida por el costado izquierdo. Ese proyectil siguió hacia la ceja izquierda de Daniel Pérez, y fue lo que causó su muerte.