El anuncio de la búsqueda de personal en un supermercado que está por abrir en el cruce de las avenidas Circunvalación Este y Palacios, generó una escena que hace mucho tiempo no se veía en Santa Rosa. Cientos  de personas haciendo cola para entregar su curriculum vitae y tener una entrevista. La fila de personas, que iniciaba en la puerta del supermercado, se extendía por Palacios y doblaba en la calle Chubut, donde recorría más de una cuadra.

Esta es una escena a la que no estábamos acostumbrados en los últimos años, con niveles de empleo crecientes en Santa Rosa y el resto de la provincia. Pero la motosierra del gobierno nacional llegó, y arrasó con todo. El corte total de la obra pública, el cierre de muchos organismos nacionales con sede en la provincia, y los despidos en tantos otros, se reflejan en la búsqueda laboral impulsada por un nuevo comercio santarroseño, con cientos de jóvenes haciendo fila para ocupar los puestos vacantes.

Despidos

En su política de reducción del Estado, el gobierno nacional despidió trabajadores en todo el país. En La Pampa se calculan más de 100 los trabajadores de organismos nacionales que se quedaron sin empleo. Algunos fueron cesanteados, sin renovación de sus contratos, más allá de que cumplían realmente con distintas funciones, y despidos de planta permanente.

Hubo cesantías en el Centro de Referencia del ex Ministerio de Desarrollo Social, ahora dependiente del Ministerio de Capital Humano. El organismo que más despidos sufrió es la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (Senaf): unos 38 trabajadores y trabajadoras del Programa Nacional Primeros Años fueron despedidos.

En la delegación local de la Secretaría de Agricultura Familiar fueron despedidos otros 15 trabajadores, y en la Anses, el número de personas afectadas llegó a 12 pampeanos que ahora quedaron sin empleo, entre no renovación de contratos y otros de planta permanente.

Esto se dio en las oficinas que están bajo la órbita de la UDAI Santa Rosa, es decir, que fueron afectadas las delegaciones de Victorica, 25 de Mayo, Santa Isabel y Catriló (estas dos últimas quedaron con una sola persona cada una, restringiéndose evidentemente la atención al público). En General Pico, Intendente Alvear e Ingeniero Luiggi, no hubo despidos.

En el 21º Distrito de la Dirección Nacional de Vialidad, fueron cuatro los trabajadores despedidos: entre ellos, una abogada que era Jefa del Área de Legales, un comunicador social de la Sección Prensa, y un mecánico especializado en Equipos. A esto se suma el despido de Guillermo Rechimont, que estaba a cargo de la oficina provincial del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), en el marco de la resolución dictada por las autoridades que decidieron avanzar con el cierre de las delegaciones. También hubo un reportero gráfico, el único que quedaba, en la agencia Télam de la ciudad.

(La Arena)