“En el día de la fecha hemos sido protagonistas de un hecho que celebramos como colectivo feminista –dice el documento-. Consideramos que la votación por la negativa, ante un proyecto presentado por el Bloque Pueblo Nuevo-UNA, que pretendía que el HCD declarara de interés municipal la “Marcha” de los antiderechos (pro abortos clandestinos) del 10/6, fue justa”.
“La decisión fue tomada con sentido común y análisis de la realidad social, ya que seis ediles consideraron que era democrático y honesto no hacer lugar a un pedido que provenía de un culto religioso”.
“Participamos en la jornada bajo la consigna: -El Estado debe ser laico-, ya que la fe religiosa es algo que cada ser humano debe alcanzar ejerciendo su libre albedrío y no bajo coacción”.
“Lo anecdótico de este acontecimiento fue que un diputado de La Pampa, el señor Daniel Robledo junto a algunos de sus familiares, desde el fondo del recinto del Concejo arengaba a “sus fieles” presentes para que gritaran y aplaudieran en los momentos precisos, o para acallar voces disidentes y vitorear a sus “representantes”.
“En otro momento de la sesión también tuvieron el tupé de gritarle desde el fondo al edil que tenía la palabra en ese momento: “Vos sabés que sos peronista”, le dijeron, ejerciendo violencia contra el hablante, a lo que este contestó con grandeza diciendo: “-Hay autoridades políticas que están promoviendo las manifestaciones y no dejan manifestarse a los concejales”-.
“Llegue nuestro agradecimiento a Ariel Reinhard, Hector Viola, Graciela Sánchez, Jorge Audisio, Roberto Gómez y René Pechín, por pensar en nuestro género, por las que están, las que no están por haber sido víctimas de abortos clandestinos y por las que vendrán, porque toda persona gestante merece el respeto por su derecho a decidir”.
“Por último expresamos que ninguna religión tiene derecho a actuar como si fuese el Estado. Vivimos en una República, no en una Teocracia. Gracias a nuestros representantes que así hoy bien claro lo dejaron”.