En la mañana de hoy, se llevó a cabo en la Sala III de Tribunales una audiencia en la cual se determinó el rechazo al beneficio de las salidas transitorias para Daniel De Titto, sobre quien pesa una pena de siete años y seis meses prisión establecida en 2014. 

El Ministerio Público Fiscal, con la representación de Oscar Blanco, se opuso a la posibilidad que el sujeto retome la libertad bajo dicha modalidad, al comprender que el balance de los informes presentados no era positivo. 

Los egresos transitorios fueron suspendidos, según afirmó la División Asistencia Social. En cuanto a la Seguridad Interna los informes plantean que debe afianzar pautas generales y en materia de educación, continúa con estudios y cursos, pero con baja presencia. Su tratamiento intramuros no ha sido bien considerado, pese a su buena conducta.

El juez valoró estos planteos, a la vez que señaló que la persona indicada como referente para el establecimiento del acusado en las salidas transitorias no se encuentra dispuesta a llevar a adelante dicha situación. 

Destacó, además, que el detenido no logró alcanzar las características de autogobierno tras el tratamiento relacionado a sus adicciones. A ello se le suma, los sumarios a los que fue expuesto De Titto, según el cual, dos de ellos fueron revertidos. 

A su turno, el imputado solicitó “una nueva oportunidad” argumentando que ha cambiado y mejorado, tanto su forma de actuar como de expresarse, afirmando que dos de las impugnaciones presentadas fueron aprobadas aunque “no se le devolvió los puntos” por su conducta. 

El último hecho

El 18 de agosto del año 2014, De Titto toma un remise y al llegar a destino se baja, amenaza al conductor del automóvil con un arma de fuego haciéndose con dinero en efectivo. Tras el aviso a la policía, es interceptado en la vía pública por personal policial no acatando la orden de los mismos para que detenga su marcha y arroje el arma. 

Luego de apuntarlos con la misma, se escondió en el patio de un domicilio cercano desde el cual tomó dicha postura nuevamente hasta ser alcanzado por un proyectil anti-tumulto.

El fiscal Damián Campos solicitó una pena de siete años y seis meses, más la declaración de reincidencia, que fue aceptada por el juez Florentino Rubio.