El pasado fin de semana, el prestigioso pianista Nicolás Ledesma presentó “Magna Tango” en La Pampa. El sábado lo hizo en el Cine & Teatro Pico y el domingo en Santa Rosa. El artista piquense estuvo acompañado de la Orquesta Típica Maracó y la voz de María Viviana.

Tras un espectáculo a sala llena, el lector de MaracóDigital y amigo personal del artista, Jorge Rubén Zapata, escribió el siguiente texto:

“El sábado por la noche, al salir del Cine Teatro Pico, comenté con mi hermano que había penetrado en mis oídos de una manera especial todo los interpretado por la orquesta de ‘Tato’ Ledesma y, hasta ahora que tomo la hoja de papel, sobrevuela sobre mi la imagen de aquel chico de barrio que (apuntalado por la ilusión de su viejo, empleado ferroviario, músico y afinador de pianos, y las ganas de mamá para que el nene haga realidad su sueño) fue a buscar lo que mas quería, estudiar piano, ese instrumento maravilloso, para hacerle brotar melodías de tango, nada menos.

No se por donde comenzar, fue tanto lo que ocurrió dentro y fuera de la sala, tal vez por lo afectivo, quizás por lo meramente musical, por la cantora o por el público.

Debo decir que he tenido el privilegio de asistir a varias actuaciones de Nicolás Ledesma en distintos lugares del país: en el Festival de Tango de La Falda, en el CCK en Capital Federal y en algún reducto tanguero de Buenos Aires como ‘Pigmalión’ jumto al maestro Julio Pane y el contrabajista, que hoy lo acompaña, Enrique Guerra, con la voz de Guillermo Galvé.

Es de destacar que ya consagrado hace años como uno de los mas altos pianos del universo musical, siga evolucionando de una manera increíble. Prueba de ello, fue la actuación de aquella tarde en la Avenida 9 de Julio invitado especialmente por el maestro Daniel Baremboin.

Llegó para actuar en nuestra ciudad con un grupo de maestros de música, como Horacio Romo, Enrique Guerra por nombrar alguno logrando un ensamble musical perfecto.

La cantora por excelencia, Maria Viviana, con una evolución a mi entender admirable, siendo ya consagrada, definitivamente lanzada y temperamental. Con un fraseo decididamente exquisito. Hubo momentos que su voz, se perdía, dentro de la orquesta, un ajuste de la consola de sonido hubiera solucionado la mínima imperfección.

El público, que colmó la sala, acompañó con vivas y aplausos fervorosos. Gente joven en cantidad apreciable, conmovida por el espectáculo musical de nuestra música popular. El gobierno Municipal y Provincial estuvo presente a través del intendente Juan José Rainone entregando un recordatorio por la presencia y la trayectoria de Nicolás.

Dándose lugar en el acto protocolar, ‘Tato’ mencionó una anécdota referente a una de sus giras a Japón, donde en una charla con dirigentes de aquella nación, comentaron que una ciudad cercana, adonde actuarían, había sido arrasada por un tsunami, y lo primero que se reconstruyó fueron los hospitales, las escuelas y los teatros, salud, educación y cultutra, todo un mensaje.

El momento de emoción

Se veía llegar, por tantos años de ausencia, desde aquella memorable noche, hace 14 años, actuando con la orquesta del maestro Leopoldo Federico. Y había la noche del sábado un agregado especialísimo, su hijo Nicolás, está en el camino del “viejo” músico de bandoneón, tocando en la orquesta.

El quebranto y las lágrimas de ‘Tato’ fueron inevitables al nombrar a sus queridos viejos, puntales definitivos en su carrera musical, recordando que sus almas estaban presentes en la sala, acompañandolos. Hizo una mención muy emocionada, al recordar que el bandoneon que ejecuta su hijo, era de su padre. Recordó también a su primer maestro de música, ‘Lalo’ Pellizari. Otro momento especial fue cuando invitó a ponerse de pie a todos sus familiares asistentes.

El trabajo discográfico presentado en CD y, recientemente editado, es de una calidad suprema y estaba a disposición de los “tangoadictos”. El tango ‘Remolino’ cantado por Maria Viviana con solo de violín de Pablo Agri, ‘Honrar la vida’ de Eladia Blázquez y ‘Mensaje’ de Discépolo y C. Castillo, a mi entender pagan el valor del CD, los demás temas completan de gran modo la obra musical y vocal.

El encuentro con sus afectos y amigos en el hall del teatro, luego de la velada, estuvo lleno de alegrías y reencuentros; por ejemplo con su maestra de quinto grado primario, a quien reconoció, y amigos que no veía desde hace tiempo. Cuando pude saludarlo me surgió la pregunta afectuosa: “Tato, no podés estar tanto tiempo sin venir... Y me contestó: Viste que lo dije en el escenario, lo sentía así”.

No tengo dudas que lo vivido en la nocturnidad del sábado, demuestra absolutamente que Nicolás Tato Ledesma es profeta en su tierra.

Cuando ya la puerta se cerraba para volver al camarín me dijo mirándome nostalgiosamente: “No me olvido de aquel vacío que comimos al lado de la parrilla”…. El recuerdo de un artista consagrado y la humildad y la valoración en el ser humano, de las cosas simples de la vida.

Inevitablemente se instaló en mi memoria lo de aquella noche en mi casa, con el quebracho crepitando en la leñera, compartiendo un buen malbec, escuchando al Polaco Goyeneche con la orquesta Típica Porteña. Me dijo: “Me podes grabar esto, es muy bueno”.

Y también aquella noche que, con mucho afecto, nos reunió en su casa, la de los viejos, la del barrio Talleres, la de la 15 y la 2, donde “Betita” lo acunó con amor entrañable de madre a él y sus hermanas, ofreció un asado con amigos y familia, porque los hijos sabemos intimamente que en un momento de la vida, los viejos se van llendo despacito, pero se quedan definitivamente en nuestro corazón.

Nicolás ‘Tato’ Ledesma, este final del relato, tiene, inevitablemente, sabor a tango.

Tu jerarquía de músico, con motu propio, tu calidad humana, absolutamente demostrada, me permite expresar que, como dijo el gran Aníbal Troilo “Pichuco”, nunca te fuiste de tu ciudad y tu barrio, siempre estás llegando….

PD: Es muy meritorio mencionar la actuación de la Orquesta Típica Maracó, en total evolución, y destacada por el maestro Nicolás Ledesma.

Es un dato gris para la nota, pero seguimos careciendo en General Pico, cuando se presentan espectáculos de real valía, de presentaciones y presentadores acordes, con conocimientos del escenario y del artista que actúa. Una pena…

Jorge Rubén Zapata