Juan Pérez y Natalia Martínez, los artesanos que moldearon la «olla ranquel» que el gobernador Sergio Ziliotto le obsequió al presidente Alberto Fernández, brindaron más detalles del «detrás de escena» y sobre cómo fue el proceso de elaboración de esta pieza ancestral. «Esta olla está pensada para el encuentro de la familia y de los amigos», destacaron.

Según revelaron los artistas, la olla había sido vendida en el mes de marzo al Mercado Artesanal y, desde ese entonces, no habían tenido más novedades hasta el jueves por la mañana. Ese día, explicaron, llamó la directora del Mercado, Andrea Pombar, y les dio la increíble noticia: el mandatario pampeano la había comprado para regalársela al presidente en su visita a la provincia.

«La verdad que fue muy inesperado», admitió Natalia a Radio Noticias, quien agregó: «Entonces, el jueves a la tarde con Andrea, armamos la caja con mucha felicidad, porque esta pieza para nosotros era muy importante. Esta olla la construimos en el 2017 y a partir de ahí tuvo un viaje muy importante: llegamos a muchos festivales con ella».

La «olla ranquel» obtuvo el primer premio en el Fondo Nacional de las Artes, y el mismo galardón recibió en la Fiesta Nacional del Poncho 2017 y la Feria Artesanal de San Juan de 2018. Asimismo, en 2019, fue seleccionada para competir por el sello de excelencia en el Wold Craft Council donde se ubicó entre las 10 finalistas.

«El viernes fue un día maravilloso, de poder sentir que ese reconocimiento y esa valoración que se le está dando. Porque además de ser un presente para el Presidente, visibiliza la cultura ranquel», remarcaron los artesanos.

Proceso de trabajo

Respecto a la pieza, Juan explicó que «es una olla hecha con arcilla de Naicó, nosotros trabajamos con eso, vamos y lo buscamos. Ese día para nosotros es muy importante porque inclusive traemos una ofrenda a la Ñuke Mapu («Madre Tierra»). Cuando llegamos a nuestras casas, preparamos la arcilla, la amasamos y después la hacemos con la técnica ‘chorizo’. Ahí empezamos la construcción».

«Utilizamos penca de tuna, que tiene una propiedad de pegamento natural. Entonces, con un pincelito, cada vez que agregamos un chorizo, vamos construyendo. Y a medida que vamos avanzando, vamos imaginando que eso va a ser una pieza para el encuentro, para compartir entre amigos, entre familia. Entonces tiene un valor especial, por lo que a cada olla le ponemos alma y corazón», completó el artesano sobre el proceso.

Sobre el diseño de la olla, Natalia recordó que «cuando la hicimos en el 2017 nos dimos cuenta que tenía que tener algo más. Ahí es donde nace las cazuelas con el diseño de piche. Justamente, nosotros hacemos mate con el diseño del piche, y como nosotros ya teníamos instalado ya este producto, dijimos ‘por qué no una cazuela piche'».

Con pasión

Natalia Martínez y Juan Pérez dirigen Tierra Ranquel Cerámica, un pequeño emprendimiento desde donde crean diferentes piezas y brindan talleres tanto en Santa Rosa como en los pueblos del interior de la provincia. «Así transcurren nuestros días, con mucha pasión y entusiasmo, siempre pensando y creando nuestras piezas. Como vivimos de la cerámica, esto nos hace que tengamos que ejercitar nuestros pensamientos y nuestras tácticas», explicaron los artesanos.

(La Arena)