El caso de las estafas con criptomonedas tuvo un importante cambio en la tarde de este martes, luego que la justicia de General Pico se declarara incompetente para continuar la investigación.
Los tres imputados, vinculados a la firma “Capital Maket”, quedaron en libertad y deberán cumplir medidas sustitutivas. Franco Hernández, el CEO de la empresa, deberá presentarse a diario en fiscalía, mientras que Federico Dominguez Chap y Pablo Heim, una vez por semana, en el mismo lugar.
El Fiscal General de la Segunda Circunscripción Judicial, Armando Agüero, explicó que “la querella y la defensa de los imputados estuvieron de acuerdo con la medida del Juez, en que la causa pase a la Justicia Federal, por tratarse de la afectación al orden económico financiero”.
En diálogo con el portal En Boca de Todos, Agüero indicó que “de la investigación surge el posible lavado de activos e infracciones a la ley cambiaria, que son delitos que deben ser atendidos por la Justicia Federal”.
La maniobra fraudulenta denominada "estafas cripto" tiene unas 50 denuncias y la suma de dinero involucrada ya se acerca a los 600.000 dólares y más de 22 millones de pesos.
“Market Capital” ofrecía en su página web una rentabilidad bimestral del 15% en operaciones financieras y con criptomonedas, aunque luego firmaban contratos por el 17% al 20% mensual en dólares. Así captaron inversores en pesos –que convertían en dólares- y en billete verde. La firma fantasma inició sus actividades en octubre de 2019 y en la misma página web destacaban que, a fines de diciembre de 2021, administraban 181 millones de pesos. También difundían en redes sociales que estaban por concretar su propia criptomoneda.
El fiscal Agüero explicó que “tomaron inversiones durante el año 2021 y algunas durante enero y febrero del 2022 y, a partir de esa fecha, dejaron de cumplir con las obligaciones y empezaron a mandar audios diciendo –a los inversores- que estaban con las cuentas trabadas, que la plataforma no les permitía retirar el dinero, que se tomarían 60 días para pensar cómo hacer un nuevo rulo, que no los molestaran enviándoles mensajes y que no los denunciaran porque, si los denunciaban, no iban a cobrar más. Esos mensajes se enviaron todos los inversores”.
(Fuente: El Diario)