Para Joaquina Testa resultó “emocionante” hacer una recorrida por la Casa de Gobierno, y sentir el espíritu de inspiración de su padre plasmado en obras que lo trascienden.

Escuchando el tono conmovido de su voz, es fácil imaginarla caminando por el interior del Centro Cívico (que cumplió seis décadas el 30 de agosto del año pasado) con la piel erizada, al reconocer detalles distintivos de la obra de Clorindo, que le hubieran permitido identificarla aún sin conocer la historia.

“Las ventanas semicirculares, tan típicas de mi padre; la manera de trabajar el hormigón... Descubrí sus trazos al instante. La obra tiene el ADN suyo, y muchas de las características de esta construcción después las vi en otros trabajos que hizo”, contó Joaquina, poco después de su visita a Santa Rosa, a la Agencia Provincial de Noticias.

Invitada por el Gobierno de La Pampa, a través del secretario de Cultura, Pablo Lucero, la hija del arquitecto, fallecido en 2013, dio una charla en la que se produjo un ida y vuelta más que interesante con el público. “En la conferencia había gente que conoció a mi padre, y contó anécdotas muy lindas. Eso le dio un valor agregado a la actividad”, relató.

En ese contexto, Joaquina dialogó con una arquitecta pampeana formada en La Plata, quien le brindó detalles de un inolvidable seminario que dio Clorindo en esa Universidad. También valoró el diálogo con Miguel García, colega de Clorindo, con quien trabajó en alguna de sus obras en La Pampa.

En este punto es necesario recordar que el multipremiado arquitecto, reconocido en todo el mundo por sus obras, se graduó en la Universidad de Buenos Aires. En momentos de un inusitado ataque a la educación pública, resulta oportuno poner de relieve este dato histórico.

El viaje a la Provincia tuvo un propósito fundamental: registrar los orígenes del arquitecto para un documental que está preparando la Fundación Clorindo Testa, con la dirección de Ezequiel Hilbert.

“Queríamos filmar en La Pampa porque su madre, es decir mi abuela, era pampeana, de Lonquimay. A los 14 años se fue a vivir a Buenos Aires, y se casó con mi abuelo, que era italiano. Algunos veranos los pasaban en Lonquimay con sus familiares, y he encontrado fotos de mi padre en esos viajes”, señaló Joaquina, que se reencontró con primos que no veía desde hacía más de 40 años.

“Fue muy movilizador tener un encuentro con mis primos Jorgelina, Silvina, Oscar y Nacho Guibelalde en Santa Rosa, y visitar el campo al que iba mi padre, Quemú Quemú y Lonquimay. Disfruté muchísimo de la reunión familiar”, expresó. En esa última localidad, también se erige un monumento hecho por Clorindo.

La hija del prestigioso arquitecto, que además fue premiado por sus trabajos como artista plástico, quiso seguir los pasos de su padre, pero en los inicios de la carrera descubrió que su vocación estaba en otra parte, y se dedicó a la docencia (es profesora de inglés).

Cuenta Joaquina que su padre era muy “circunspecto”, y carente de vanidad. “No se vanagloriaba de sus obras, ni pretendía dejar un legado. Vivía el presente. Recuerdo que cuando tenía 8 años fuimos a Santa Rosa en plan familiar, era el año 1977, el Centro Cívico ya estaba inaugurado desde hacía tiempo, pero él no hizo una recorrida para mostrarme su obra. Jamás hacía alarde”, señaló.

Otra característica de su padre que destaca Joaquina, es que “le daba la misma importancia al edificio del Banco de Londres o a la Biblioteca Nacional (dos de sus emblemáticas creaciones), que a una casa particular que le habían encargado. Su desafío era resolver el problema del cliente”, reveló.

Joaquina trabaja en la Fundación que preside su madre, Teresa Bortagaray, y se encuentra organizando múltiples actividades en el año del centenario del nacimiento de Clorindo. “Él hubiera cumplido los 100 el 10 de diciembre del año pasado, así que estamos llevando a cabo un conjunto de acciones que iniciaron en 2023, y continuarán durante todo el 2024”, indicó.

Los amantes de la obra de Clorindo pueden acceder a más información al respecto en la página: fundacionclorindotesta.org y en el Instagram @fundacionclorindotesta