De acuerdo a lo que se pudo establecer de fuentes incontrastables, el móvil del autor del salvaje ataque a las dos mujeres de Eduardo Castex habría sido el robo. Pero nada elaborado ni con expectativa de botín cuantioso. Parece que el ladrón comenzó a hurgar en los bolsos y billeteras de sus víctimas buscando el suelto que pudieran tener.
Los pesquisas han dado por acreditado que ingresó por la parte trasera del patio, tal como adelantó Maracó Digital y que sorprendió en el interior de la casa a Josefa Moreno de Giovannini (88), mientras Ana María “Pocha” Martón (65), su familiar y acompañante barría la vereda. Eran alrededor de las 8,30 de la mañana del domingo 31 de marzo.
“Pocha” ingresó con rapidez a la vivienda cuando escuchó un fuerte grito de Josefa, que quedó desvanecida, inerte, tendida en el piso, producto de los golpes que recibió.
Allí se percató de la presencia del desconocido, que no demoró un instante en atacarla ahora a ella, sometiéndola y golpeándola hasta dejarla tirada, convencido de que tampoco podría recuperarse, pero iniciando igual un incendio, presuntamente para que el fuego eliminara toda huella de sus delitos.
Los Bomberos de Castex evitaron que las llamas se extendieran, pero el intenso humo que se originó fue un factor que también gravitó en el estado de Josefa Moreno, una anciana que tenía problemas de asma y que golpeada y desvanecida, inhaló durante varios minutos la humareda.
Lo que nadie puede explicarse es la razón de la saña con la que el sospechoso trató a las dos vecinas. -Por fortuna, “Pocha” Martón sigue recuperándose y la inflamación de sus golpes ha comenzado a ceder-. Según trascendió, a la hora que atacó a las dos mujeres, el detenido no se habría encontrado ni drogado, ni alcoholizado, ni fuera de sus cabales, a juzgar por los análisis y exámenes a los que fue sometido, aunque algunos resultados se demorarán unos días. Pero se supo sí, que un análisis de orina habría dado negativo al consumo de droga.
Hasta donde se sabe, el sospechoso salió por el frente de la vivienda al retirarse del lugar. Según las fuentes consultadas, los investigadores podrían sumar a las pruebas colectadas, la toma de video de alguna cámara que podría haberlo captado en ese momento.
Pero también tendrá en su contra el testimonio de una de sus víctimas, quien sin saber su identidad pudo describir sus facciones y dar detalles invalorables para los pesquisas, que ya tienen además, un preciso “mapa” de sus pasos durante la noche del sábado y la madrugada del domingo, así como las personas con las que se lo vio, algunas de las cuales fueron demoradas y ya recuperaron su libertad.
Hasta estas horas, ninguna autoridad ha salido a decirlo, pero lo cierto es que para adentro, la Policía y la Justicia de La Pampa consideran que tienen detenido al autor de los dos aberrantes delitos.
La fiscalía adelantó que en la mañana del martes se realizará la formalización de la acusación. Allí se confirmará la identidad del sospechoso cuyo nombre repite toda la conmocionada comunidad castense.
En un primer momento se dijo que el detenido es oriundo de General Pico. No es así. Vive en Eduardo Castex, donde tiene pareja y es padre de un niño de unos 2 años de edad. Otro dato concreto: no tiene antecedentes penales de ningún tipo.