El martes, a las 22 horas en Santa Rosa, falleció Doña Teófila de quien siempre había seguido su historia a través de los medios. En noviembre del año pasado, cuando viajé a Santa Isabel para realizar un trabajo, tuve la fortuna de conocerla y entrevistarla para un video documental sobre la historia del pueblo y sobre la vida en esa zona del oeste profundo pampeano.
A ella la presenté obviamente como una gran guerrera, luchadora.
Lamentablemente, ese día, la técnica me jugó una mala pasada (justo en esta nota!) ya que la batería de un micrófono dejó de funcionar y entonces debí realizar la misma con el propio micrófono de la cámara además en uno de esos días bien del oeste: con muchísimo viento.
La encontré afuera en el patio de su casa, también hacía muchísimo calor, y allí junto a una de sus hijas, María Luisa Videla, que ayudó un poco en contar parte de su vida, registré esta nota que guardaré en mi recuerdo ya que fue un placer conocerla.
En las fotos que he publicado oportunamente ella genera mucha ternura y en su rostro y sus manos se ven los años de lucha y sacrificio.
Fue una mujer única peleando por sus tierras cuando se las quisieron sacar allá en la zona de Algarrobo del Águila y Santa Isabel.
Su caso ocupó todos los medios provinciales en su momento y generó un movimiento (La Comunidad Teófila Videla) que la ayudó a buscar justicia.
SU MAYOR ANHELO FUE TENER LA ESCRITURA DEL CAMPO EN SUS MANOS ANTES DE MORIR.
Anoche nos dejó y sin embargo ese valioso papel nunca llegó a su poder.
Esperemos que en algún momento eso se cumpla al menos para reivindicar su memoria.
Gracias Doña Teófila por su ejemplo de vida y por formar parte de la galería de grandes mujeres luchadoras pampeanas.
Falleció anoche en Santa Rosa y esta mañana fue inhumada en el cementerio de Santa Isabel.
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