Marcelo Corazza, el primer ganador del reality Gran Hermano Argentina, fue detenido por la Policía de la Ciudad, en el marco de una causa de corrupción de menores.

Así lo informaron a La Nación fuentes policiales. Corazza fue detenido por personal de la División Trata de Personas de la Policía de la Ciudad, en su casa de Tigre.

En el marco de la causa, a cargo del Juzgado en lo Criminal y Correccional porteño N° 48, hubo seis allanamientos. En el expediente, el Ministerio Público está representado por el fiscal Patricio Lugones.

“Como resultado de los procedimientos, se incautaron elementos de interés para la causa, y fueron detenidas cuatro personas”, dijeron las fuentes consultadas.

La investigación, según explicaron a La Nación fuentes judiciales, comenzó a fines de año pasado. Tras el avance de la pesquisa, en las últimas horas, el juez Javier Sánchez Sarmiento ordenó la serie de allanamientos.

Los operativos se hicieron en Tigre, General Rodríguez y en la ciudad de Oberá, en Misiones, de donde era el supuesto líder de la organización criminal. En los allanamientos, el personal policial secuestró teléfonos celulares, notebooks, discos externos, cassettes VHS, pendrives y tablets.

Según informaron fuentes con acceso al expediente, la causa comenzó tras una denuncia presentada en la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex). La causa comenzó, según la policía, cuando “dos testigos de identidad reservada denunciaron que una persona, a quien sólo podían individualizar por su nombre de pila, los habría corrompido cuando tenían 11 y 14 años”.

Según fuentes policiales, el supuesto líder de la banda había sido acusado de corrupción de menores en Oberá, pero finalmente, fue sobreseído.

“El jefe de la banda, después de corromper a las víctimas, todas de sexo masculino, las obligaba a prostituirse y se quedaba con el dinero que se obtenía. De las pruebas reunidas y los testimonios logrados, se conocieron otras personas que participaban activamente de la organización criminal”, agregaron los informantes.

Desde la Policía de la Ciudad afirmaron que la organización operaba desde hacía dos décadas, en el norte del país y en la provincia de Buenos Aires.

“Las víctimas eran traídas a la zona de General Rodríguez, con la excusa de viajar a la casa de la madre del sindicado líder, desde se formalizaban las entregas y sometimientos”, agregaron los informantes.

En principio, Corazza no sería integrante de la organización. “El exGran Hermano era ´cliente´ de la banda”, agregaron los informantes.

Según el artículo 125 del Código Penal, “el que promoviere o facilitare la corrupción de menores de dieciocho años, aunque mediare el consentimiento de la víctima, será reprimido con reclusión o prisión de tres a diez años. La pena será de seis a 15 años de reclusión o prisión, cuando la víctima fuera menor de 13 años. Cualquiera que fuese la edad de la víctima, la pena será de reclusión o prisión de diez a quince años, cuando mediare engaño, violencia, amenaza, abuso de autoridad o cualquier otro medio de intimidación o coerción, como también si el autor fuera ascendiente, cónyuge, hermano, tutor o persona conviviente, o encargada de su educación o guarda”.

(La Nación)