En la continuidad de la causa por la cual una banda de estafadores que, mediante la modalidad del "cuento del tío" lograron hacerse con 37.000 dólares en General Píco, el Miniserio Público Fiscal logró llevar a cabo la formalización de Roberto Grasso. Esta era una de las personas investigadas y que estaba siendo buscada por la justicia por su participación activa.
Grasso transitaba por las distintas ciudades del país en un VW Bora blanco y era quien visitaba a las víctimas: "Era el último imputado que teníamos con pedido de detención desde hacía ya unos meses. Es el único que teníamos pendiente. Es el enlace con las personas en la provincia de Buenos Aires, que son las personas Villafañe, Santoro y Maciorowski", indicó el fiscal general Armando Agüero.
Desde el pasado año, este integrante de la banda de estafadores tenía intervenidos sus celulares por lo que la detención se dio gracias a la tecnología en cuestión. La aprehensión del sujeto se produjo en Isidro Casanova, aunque se encuentra privado de su libertad en Tapaiqué, una localidad cercana de General Alver, ya que se encuentra a disposición de la justicia de aquella ciudad.
Agüero confirmó que se solicitó la prisión preventiva por 90 días con el fin de evitar el riesgo de fuga y obstaculización, aportando un dato más a la causa: Investigan la participación otro integrante más, que sería quien tomó el dinero de la señora Guagliardone.