En el partido de ida de una de las semifinales de la Copa Libertadores, Boca Juniors, obsesionado por conquistar la tan ansiada séptima, recibió a Palmeiras de Brasil, rival al que en ediciones anteriores venció en tres ocasiones: igualaron 0 a 0.
En un primer tiempo en el que la visita sólo apareció en el inicio, el conjunto de Jorge Almirón fue de menor a mayor, y se fue al descanso mereciendo claramente la ventaja, por iniciativa y situaciones en las que careció de puntería.
Después del primer intento desviado de Artur, Edinson Cavani abrió y cerró el período de chances xeneizes con cabezazos desviados, Weverton intervino ante Cristian Medina, y Miguel Merentiel tuvo dos, una que rozó tras un centro de Valentín Barco y se fue a centímetros del palo, y otra que le frustró el arquero. Boca era más, gracias al empuje de Luis Advíncula y el Colo por ambas bandas, y Merentiel y Cavani encendidos, ante un adversario muy tibio.
El complemento inició igual que su antecesor. Amenazó primero la visita con un tiro de Raphael Veiga, sin puntería, y después fue todo de Boca, con un gol anulado a Merentiel después de que Frank Fabra exigiera a Weverton, y otra chance clarísima en la que Cavani no pudo empujar tras un rebote del arquero.
Almirón comenzó luego a mover el banco con intenciones de encontrar esa puntada final tan esquiva. En esa renovación, perdió a su figura, el Colo Barco, -seguramente en su límite físico- y ganó la experiencia de Darío Benedetto. Pero los minutos transcurrieron sin novedades en el marcador.
El “Xeneize” contó con las mejores chances y mereció algo más, pero no pudo romper el cero, y el duelo de ida ante Palmeiras terminó igualado: la serie sigue abierta, y la revancha será jueves 5 de octubre en Brasil. Si termina en empate, habrá definición por penales.