Amparo Fernández reemplazará en esas funciones a José Jerónimo, quien tuvo a su cargo la Representación La Pampa del INT por más de 12 años, y quien se retirará después de la conclusión de la Fiesta Nacional del Teatro en Santa Rosa.
Corren nuevos paradigmas, hay otras miradas en el teatro, con una fuerte impronta de género para lo que se viene. Seguro será un desafío para la directora –la primera mujer que asume esa tarea en la provincia-, que ahora deberá abocarse de lleno a gestionar para los otros, para la comunidad teatral.
El hombre que se aleja tiene el privilegio de cerrar su ciclo nada menos que con la realización de la Fiesta Nacional en La Pampa.
A José Jerónimo, “les teatreres” deberán reconocerle, cuando se repase su labor, que consiguió lo que la provincia no tenía, aún cuando falta mucho para lograr un ideal teatral.
Con Jerónimo, el teatro tuvo un resurgir cualitativo y cuantitativo. A su empeño se debe que crecieran y se consolidaran grupos en Santa Rosa y en varias localidades, y que se instalaran salas y que los grupos pudieran equiparse con sonido e iluminación, elementos básicos para lograr puestas en escena dignas, elaboradas.
El hombre que ahora se retira, fue también el factótum para que la Fiesta Provincial del Teatro cambiara después de casi 30 años las “luces” de la capital, para trasladarse a los pueblos, en una necesaria muestra de federalismo teatral que hasta entonces no se había producido.
Ahora llegará Amparo Fernández. Lo hará con su propia impronta. Una apabullante sucesión de buenos augurios la recibió en las redes. La noticia de su selección trascendió este viernes desde distintos ámbitos, pero el anuncio oficial con la decisión del jurado, se producirá en los próximos días desde el seno del INT.