Una valija que "vibraba de manera sospechosa" encendió las alarmas en una sala de conciertos de Viena. Pensaron que era una bomba, pero la policía descubrió rápidamente que se trataba de un juguete sexual.
Una empleada del guardarropas avisó a las autoridades cuando escuchó que una maletín vibraba solo durante un espectáculo en la Casa de conciertos de Viena el martes 5 por la noche, informaron en un comunicado.
Un experto en explosivos fue designado para inspeccionar la valija con un equipo de rayos X. Cuando pasó el objeto por el escáner, vio que el culpable de provocar un susto era un inofensivo juguete sexual que estaba encendido.
"Los oficiales pudieron identificar rápidamente la causa de la vibración y, por lo tanto, no fue necesario alterar el rendimiento y el espectáculo continuó", avisó el oficial Patrick Maierhofer.
La valija fue devuelta a su propietaria y su compañero, y los oficiales "les desearon una velada placentera", de acuerdo al comunicado.
Según el diario Kurier, este incidente no molestó al público que fue a disfrutar de un concierto de la Orquesta Sinfónica. La situación pasó desapercibida y el show continuó hasta el final.
Los medios locales, de acuerdo al Daily Mail, se hicieron eco de una frase de la película El club de la pelea (1999) y la relacionaron con el hecho: "Las bombas modernas no funcionan, pero si la maleta vibra, entonces tenemos que llamar a la policía".
(Clarín)