La decisión fue adoptada después de una ronda de consultas que incluyó a todas las fuerzas de seguridad e incluso a las Fuerzas Armadas.

Según indica DyN, Palmaghini ya comunicó a todas las partes la designación de Gendarmería, incluida la defensa de los dos policías federales que trabajaban como custodios de Nisman cuando se produjo su muerte.

El peritaje integrador había sido reclamado desde el principio de la investigación por la ex mujer de Nisman, la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado, y apuntaba a que se pusiera en un mismo contexto las conclusiones de la experticia médica sobre el cuerpo de Nisman y la criminológica, en la escena de la muerte.

Sin embargo, la fiscal Viviana Fein había optado por realizar ambos trabajos con dos juntas especializadas por separado, tras sostener que no existían en la Argentina peritos criminológicos con capacidad para intervenir en un trabajo interdisciplinario, aunque Gendarmería Nacional respondió que cuenta con los profesionales capacitados para determinar circunstancias del escenario de la muerte y también expertos forenses, por lo que aportará "un equipo de peritos" para la tarea encomendada.