Mirando para atrás hay un camino largo lleno de vivencias que nos dejó ese gran viaje, el que compartimos con todos ustedes, el que nos llevó a dar la vuelta al mundo recorriendo muchísimos países por diferentes continentes. En el que subidos a una casita con ruedas recorrimos miles de kilómetros encontrándonos con miles de almas hermosas y paisajes increíbles. Noches frías y días interminablemente calientes. Conociendo otras culturas, jugando con otros niños a los mismos juegos de siempre y a otros nuevos. Haciendo la escuela en casa y aprendiendo de la vida cada vez que abríamos la puerta y nos sorprendía el patio más grande del mundo.

Todo pasó y nos dejó una montaña de nuevas experiencias. El aprendizaje de que en este mundo hay muchísima gente buena, con el corazón abierto para brindar amor y hacernos sentir como en casa aunque estemos en el otro lado del mundo. Y viajar tiene todo eso y mucho más… el día a día nutre y nos despierta, haciéndonos acordar que estamos vivos y que no hay mejor momento para disfrutar que este.

Durante unos meses estuvimos en nuestra ciudad, General Pico, La Pampa, dejando descansar la casita móvil, presentando nuestros espectáculos y disfrutando de la vida anclados en un solo lugar, con los amigos de siempre, esos hermanos de la vida.

En ese tiempo fuimos reacondicionando el motorhome. Ajustamos tornillos, porque después de tanto viaje todo se afloja, limpiamos y reparamos. Controlamos frenos, emparchamos una picadura en el guardabarros y pusimos un par de elásticos nuevos para que quede más “levantadita” porque la casa volvió chueca de tanto subir y bajar.

También tuvimos que cambiar los amortiguadores y hacerle por supuesto una alineación y balanceo para que siga pisando derechito y nos siga llevando por buenos caminos como hasta ahora. Cambiamos la correa de distribución y le dimos una revisión para saber que todo sigue marchando bien. En casi todos los lugares los amigos de los talleres quisieron meter mano de manera desinteresada y colaborar con nuestro viaje aportando su granito de arena. A cada uno de ellos… Gracias!!!!

Entre los preparativos también sumamos dos ventiladores para hacerle frente a los calores insoportables de los climas tropicales y una olla essen, que cumplirá la función de hornito dándonos unas ricas tortas. Libros, material de escuela, abrigo para atravesar lo que queda de este invierno y para el que vendrá, que nos agarrara…no sabemos dónde!

Todo está quedando bien, perfecto para salir a girar nuevamente por el mundo. Y esta vez será por el continente americano. Sentimos que jugamos de locales. En el viaje pasado fue dirección este, esta vez será hacia el norte de principio, cruzando las tres américas hasta llegar a la parte más alta, Alaska.

Entren, pasen, vean el primer capítulo de este nuevo gran viaje. Los preparativos de otra aventura que comienza en unos días, que nos llevara a seguir soñando sobre ruedas, en una casita móvil, en familia y compartiendo este sueño con todos ustedes.

Gracias por acompañarnos!!!!

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