“Si este criterio se limita a la salud reproductiva, lo primero que hay que cuestionar es que pese al protocolo de abortos no punibles la mayoría de los ginecólogos-en General Pico todos- se niega a practicarlos por "objeción de conciencia" (?) anteponiendo sus creencias personales a los derechos de las mujeres, lo cual es inadmisible en el ámbito de lo público. Las acciones por la salud de las mujeres deben llevarlas adelante los especialistas en los Hospitales evitando no transgredir como hasta ahora, el protocolo establecido. Si de bienestar mental se trata, aún no se logra la instalación de Refugios con equipos interdisciplinarios de apoyo, contención y asesoramiento a las víctimas de violencia machista, e inserción laboral que permitiría independencia económica para salir del circuito violento. Pero lo más importante para tener salud, es que dejen de matarnos cada 31. No somos sólo las mujeres las que necesitamos “concientizarnos”. Son los médicos obstetras, ginecólogos, comisiones de políticas de género, funcionarios del poder judicial, de la policía y demás agentes estatales los que deben tomar medidas urgentes en defensa de nuestra salud. Hasta ahora el estado no sólo no la está garantizando, sino que en muchos casos reproduce la violencia contra nosotras, a través de sus distintas instituciones. Se trata de tomar la decisión política de aprobar el presupuesto que permita aplicar plenamente YA, la ley 26.485 de " detección, prevención y erradicación de la violencia contra las mujeres".
Organización Feminista Guapabanda.