Mientras el mal clima continuaba castigando a toda la región del Litoral, el río Gualeguaychú seguía creciendo acompañado de la sudestada. Estas condiciones habrían forzado a este animal a separarse de su familia y desplazarse sin rumbo a través de estas aguas.
De acuerdo con lo informado, personal de Prefectura se comprometió a controlar a diario la situación del animal. En tanto, viendo las repercusiones que causaba este insólito visitante, las autoridades pidieron a los vecinos que no se acerquen a la zona, a fin de proteger al animal del estrés y resguardar del mismo modo la seguridad de los personas.
La semana pasada, un elefante marino fue descubierto en el barrio de Mercedes, Uruguay. En este caso, el animal tampoco fue capturado sino que quedó bajo vigilancia de las autoridades, quienes advirtieron a las personas que eviten tener contacto hasta que retome su camino.
Fuente: Infobae.com